¿Necesito un psicólogo? Es una pregunta que puede ser que te hayas formulado alguna vez … ¿es así?
Son muchas las circunstancias que te pueden llevar a querer consultar con un psicólogo pero es posible que cuando vayas a dar el paso te asalten ciertos temores y dudas…
En el siguiente vídeo te explico cuándo es aconsejable consultar a un psicólogo y qué es lo que te vas a encontrar si te animas a iniciar a una terapia:
¿Realmente estoy tan mal como para dar este paso?
¿Puedo solucionar mi malestar yo sola/o cuando ya llevo meses intentándolo y no lo logro?
Son cuestiones que pueden asaltarte por estereotipos que de antaño se tienen respecto a esta profesión, posiblemente te hayas encontrado con personas que lleven en secreto que están en terapia psicológica por el miedo al qué dirán… Puede ser que te venga a la cabeza si es «normal» esto que te sucede y si puede ser que estés «loca/o» , puede ser que en tu entorno cercano el ir a un psicólogo sea un tema tabú y se vea como algo «raro»…
¿O puede ser que para ti sea raro?
En este artículo junto con el vídeo que has visto quiero despejar tus dudas acerca de cuándo consultar y cómo es una terapia psicológica desde mi modelo de trabajo.
Sea como fuere, puede ser que te hayas estado dándole vueltas y finalmente te hayas casi decidido a dar el paso y justo cuando te dispones a pedir cita, entres en un diálogo mental donde principalmente por miedo te auto-convenzas de que vas a seguir probando la manera de estar bien por tu cuenta y sientas que prefieres posponer esa consulta para más adelante (posponer lograr la calidad de vida que deseas para más adelante…)
¡OJO con la creencia de que si miras hacia otro lado el problema desaparece…!
Es algo que suele suceder, evitar hablar de las cosas que nos generan malestar pensando que así estaremos bien y posponiendo vaciar esa mochila que llevas a cuestas en otro momento. Puede ser que la puedas vaciar más adelante pero… y todo el peso que vas a estar arrastrando hasta que eso suceda… ¿No crees que posiblemente esto te genere otras consecuencias negativas? (por ejemplo, en este caso… aparentemente y como mínimo… dolor de espalda)
La tendencia que tenemos de tapar las cosas que no nos gustan no hace más que aumentar el malestar y complicar las cosas, a corto o a largo plazo.
Lo veremos más claro con un EJEMPLO:
Imagínate una Olla a presión llena de garbanzos y puesta en el fogón:
Pensemos tu psiquismo como si fuese la olla..
Los garbanzos como los problemas, insatisfacciones, malestar, dolor emocional y otras preocupaciones que te acompañan, …
Para que la olla funcione adecuadamente y elabore la comida es necesario que tenga una válvula de escape, ésta sirve para elaborar y tramitar lo que se está cociendo en su interior (en tu mente).
Pero…
¿Qué pasa si tapas la válvula de escape como si esos problemas no existiesen?
El final es previsible…
Si tapamos y tapamos y no nos damos la oportunidad de sacar todo eso que nos daña, el mecanismo explota y esto da lugar a mayores consecuencias y en el caso de una persona, pueden aparecen otros problemas asociados que a veces uno no sabe de dónde vienen.
Ya puede salir a través de ataques de ansiedad o angustia, depresiones, adicciones, problemas psicosomáticos, etc. etc. etc.
Por suerte, cada vez está más extendido el acudir a un psicólogo y es algo que se va normalizando, de hecho en muchos países ya es algo totalmente extendido y uno va a un psicólogo con la misma naturalidad y espontaneidad como cuando va a un dentista.
¿O es que si te duele una muela durante un tiempo te vas a quedar en casa esperando a ver si se cura por sí sola?
Y es que para consultar no es necesario tener un trastorno mental o tener algo grave, de hecho, en consulta para mi lo importante es ayudar a una persona que está sufriendo.
Para que te hagas una idea, la mayoría de los pacientes que trato en consulta son personas como tú cada una con sus particularidades y singularidades puesto que cada persona es única y cada historia personal diferente.
Mi interés está puesto en escucharte sin juzgarte, comprender lo que te sucede y permitir que te sientas libre para expresarte y ser tú, ayudándote mediante preguntas a descubrir qué te sucede, guiándote a través de señalamientos, hipótesis e interpretaciones para ir desmenuzando tu malestar y que juntas/os podamos entender qué es lo que te está sucediendo y logres afrontar la vida de una manera que sea satisfactoria para ti, superando tu malestar.
¿Te animas a probar?
Un saludo,
Totalmente de acuerdo con la orientación de tu artículo Laura, en determinadas ocasiones de nuestra vida, la presión es tan enorme que si no existe esa «válvula», la propia presión nos puede causar malas pasadas , incluso el que hagamos a nuestro entorno cercano (laboral, aficiones, etc,) partícipe de esa presión. Considero, pues , que tenemos que hacer algo para reconducir ciertas situaciones que pueden hacernos malas pasadas, ahí estás tú desde la escucha infinita y tú buen hacer profesional, la consulta de psicología se hace imprescindible para tener un buen fin y un entorno saludable y cómodo para nuestra vida. atte. José Manuel.
Muchas gracias José Manuel por tu aportación.
Un saludo,
Laura